Era todo un honor llevar la marca y demandaba determinados esfuerzos para tener continuidad, lo cual se traducía en éxitos comerciales.

Los nuevos tiempos y la avalancha tecnológica en todos los rubros, y particularmente en la hotelería, cambiaron tantos paradigmas como una ola que arrastra indiscriminadamente, llevándose muchas cosas valiosas; como por ejemplo... las representaciones hoteleras.

Alguien pensó... qué fácil es vender desde una computadora y competir con datos de un revenue marcando que es hora de bajar 2 dólares y volver a recibir reservas.

La bonanza que rige el mercado y no cada hotel, equipara en un éxito más económico que cualitativo y ese es quizá el peor perjuicio para aquellos que presumen que es más importante ser baratos que ser buenos.

Hoy el mercado da un cachetazo circunstancialmente perjudicial, pero enormemente valioso para subir la vara de producto y servicio.

Ahora hay que recurrir a todas las armas y entre ellas la representación hotelera, demostrando que aparte de dar tarifas, hay que atender al cliente como antes, como siempre debió ser.

Los Operadores Mayoristas de Turismo sonríen ante una atención casi exagerada con ánimo de acercarlos a su producto, cuando durante mucho tiempo ni los llamaban por teléfono.

Cuando uno da tarifas y muestra el hotel, solo comienza una gestión, pero la venta se madura cada día, se atiende en cada gesto y se consolida demostrando que estamos ocupados en mantener esa relación.

Es como una hermosa bicicleta que, dejada en el cordón de la vereda, pero sacándole los ojos de encima, seguramente alguien se la llevará. Los ladrones están acechando en cada esquina, detrás de cualquier árbol o transitando las calles; la manera de cuidarla es preservarla, darle el mejor mantenimiento, conservarla limpia y generar un vínculo afectivo, para seguir juntos.

Representar un hotel es ser el nexo más eficiente para atender cualquier requerimiento, de servicio o económico y obrar de garantía para dar tranquilidad de que lo dicho se realizará.

Un viejo gerente comercial, un día me dijo... "Hacerse amigo y los negocios vendrán solos", quizá esa sea la explicación más sencilla y contundente... Todos deseamos lo mejor para nuestros amigos; representar un hotel, también más allá de lo profesional, debe ser una muestra de cariño.

Autor: Victor Belchior

VB Representaciones Hoteleras

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