Praia do Rosa, el centro de Florianópolis, Jurerê y Governador Celso Ramos son pueblos, playas, municipios y ciudades que pueden jactarse de su hotelería de primer nivel. En el estado de Santa Catarina, en el litoral sur de Brasil, reciben huéspedes en hoteles que se consagraron a través de los años, pero también en resorts que son flamantes y ya dan que hablar por la excelencia de la propuesta. Aquí, una selección de los destacados.

Fuso

La discreción del portón de entrada anticipa algo de lo que se siente una vez que se atraviesa el umbral de este extraordinario hotel enclavado entre Praia do Forte y Jurerê, al norte de la isla de Florianópolis. Alocasias, flores de jengibre y palmeras de todo tipo se cuelan por los caminos que intercomunican las 13 habitaciones con las áreas de uso común de este complejo de 7.000 m2 que fue pensado para adultos.

Los empleados del spa están siempre disponibles para los huéspedes en Fuso.

Sofía López Mañán

Techos vivos combinan la simpleza de la uña de gato (carpobrotus) con la potencia de la flora nativa. Pájaros de día, y ranas, por la noche, invitan a un concierto espontáneo que bien puede disfrutarse desde las piletas climatizadas de cada habitación. Obra del paisajista Alex Hanazaki, la fusión de naturaleza y espacio habitable es el valor a resaltar en Fuso. Y también el anhelo de la empresaria y arquitecta Eduarda Tonietto, artífice de este lugar que fue inaugurado en diciembre del 2020. Listones de madera, cabos marineros, lámparas de mimbre y vasijas de cerámica en colores tierra son los toques que aportan calidez en un espacio de por sí minimalista, con techos de hormigón y pisos de cemento. Aquí el vidrio es sutil protagonista y hace foco en lo que pasa de otro lado: en la naturaleza. Gris, blanco y negro se tamizan con ocre en uniformes, toallas, sábanas y muebles de factura impecable. Mientras la pileta infinita invita a la contemplación del mar en su entrada a la Bahía Norte, un nivel más arriba impacta la terraza con vista 360 grados de la playa de Jurerê, de Praia do Forte y del sector continental del litoral catarinense.

Las habitaciones de Fuso son súper funcionales.

Sofía López Mañan

Fuso está emplazado arriba del morro, entre Jurerê y Praia do Forte.

Sofía López Mañán

A pasitos del Fuerte de Ponta Grossa, el hotel tiene un muy buen spa y gimnasio. Con el chef Anderson Quevedo, el desayuno por pasos es muestra cabal de la distinción de este sitio. Un sorbo de shock matinal -jugo de alguna fruta de estación con jengibre o pimienta- antecede al queso grillado y los huevos revueltos que se preparan en el momento para una jornada de goce y desconexión. Desde u$s 516 la doble con desayuno.

Serv. José Cardoso de Oliveira, 633 - Jurerê, Florianópolis. T: +55 (48) 3380-3200. IG: @fusohotel

La pileta infinita de Fuso está inmersa en el entorno natural del norte de la isla.

Sofía López Mañán

La deco de Fuso es sobria, de excelente calidad y acorde con la propuesta integral del complejo.

Sofía López Mañán

LK Design

Este impecable hotel de diseño es el sueño de Walter Osli Koerich, hombre de negocios vinculado a la construcción. En su nombre le rinde homenaje a Linda, su esposa. Queda sobre la Beira Mar Norte, a unas cuadras del shopping más importante de la ciudad, con vista al mar, fácil acceso y política pet friendly. Inaugurado en diciembre de 2020, es una torre de 168 habitaciones de líneas rectas y simples, sin estridencias. La piedra, el cuero y los linos decoran los ambientes.

Lk Design Hotel se destaca por lo armónico y exquisito de la ambientación.

Sofía López Mañán

Los espacios comunes de Lk Design están diseñados para que los huéspedes se sientan a gusto en Florianópolis.

Sofía López Mañán

Se destaca la piscina climatizada en lo más alto del edificio y la amplitud de los espacios comunes. El restaurante Osli -por el segundo nombre del dueño- está a cargo del catarinense Felipe Silva, y no falta gravlax al desayuno, ni tampoco opciones libres de gluten, ni de lactosa. La carta de marcada impronta azoriana tiene también platos de Corea, India y Perú para completar una estadía óptima. Desde u$s 230 la doble con desayuno.

R. Bocaiúva, 1755 - Florianópolis Centro. T: +55 (48) 3112-2233. IG: @lkdesignhotel

La pileta de Lk Design está en lo más alto de la torre y tiene vista a la bahía.

Sofía López Mañán

Lk Design Hotel queda en el centro de Florianópolis.

Sofía López Mañán

Fazenda Verde by Neco

Un clásico de Praia do Rosa con acceso directo al mar y vida de club. Con treinta años de trayectoria, se compone de 23 bungalows renovados y bien equipados. Algunos son suites para parejas, otros tienen dos cuartos y los hay también de tres. Todos con cocina, parrilla y sala de estar. La pileta al aire libre, la cancha de paddle y el salón desayunador propician el intercambio entre los huéspedes que se alojan en este terreno de tres hectáreas.

Fazenda Verde by Neco es un complejo tradicional de Praia do Rosa.

Sofía López Mañán

Dentro de Fazenda Verde by Neco hay pileta.

Sofía López Mañán

Tiene un bar, Solar, pero además comunicación interna con tres buenos restaurantes: Coral, Beleza Pura y San Diego. Detrás de todo está Cristiano Agrifoglio -Neco, para todos-, el pionero de Rosa que en 1985 llegó desde Porto Alegre para surfear. Construyó cinco casitas que se alquilaron rápido (por un argentino, justamente) y, según evoca, "desde entonces el teléfono no dejó de sonar". Por su ubicación estratégica y vistas románticas es ya un tradicional escenario de casamientos frente al mar. Desde u$s 220 la doble con desayuno.

Rua da Pousada Verde do Rosa s/n. T: +55 (48) 3355-6389. En Buenos Aires, T: +54 9 11 5015-1928. planusse2011@gmail.com IG: @fazendaverdepraiadorosa

Villa Gardena

La sensación de hogar prevalece en esta posada boutique de detalles sofisticados y exuberante verde. Rejane Rosa de Oliveira es la querible y eficaz anfitriona -con formación en RRPP- que compró esta casa de tres cuartos en 1991. Llegó con su marido, Bruno Segalla (h), atraídos por la belleza de Praia do Rosa y sin intención de levantar un hotel. Originarios de Caxias Do Sul, de pronto tuvieron que elegir dónde quedarse y apostaron por Rosa.

En Villa Gardena, en Praia do Rosa, las habitaciones tienen vista al mar.

Sofía López Mañán

La posada Villa Gardena está construida respetando lo que propone la naturaleza del lugar.

Sofía López Mañán

En febrero de 2017, tras algunos años de obra, inauguraron esta posada. Ligados a la escultura por los Segalla, la nombraron así tras un viaje a los talleres de madera y bronce de Val Gardena, en los Alpes. Hoy la posada se compone de cinco acogedores cuartos. El sauna es uno de los rincones que, al incluir las piedras originales del morro, habla de la preservación del terreno, súper en consonancia con el ánimo de la vecindad. Piezas de arte, arreglos florales delicados, una pileta sin baranda -no alojan menores-, los decks con hamaca y la gastronomía del chef Cris Accorsi completan la experiencia. Desde u$s 220 la doble con desayuno.

Rua Mané Chico s/n - Praia Do Rosa, Imbituba. T: +55 (48) 99106-7605. IG: @villagardena

Ponta dos Ganchos

Escondido en las entrañas del barrio Ganchos, dentro del inquieto municipio de Governador Celso Ramos, se trata de un complejo generoso en espacios e insuperable en servicios, propiedad de un uruguayo y de un inglés que prefieren el anonimato. Inaugurado el 15 de diciembre de 2001, nació con un par de bungalows hasta terminar, en 2009, con 25 unidades que a la fecha fueron íntegramente remodeladas. Apto solo para mayores de 18 años, Ponta dos Ganchos hospeda principalmente parejas deseosas de tranquilidad y placer, pero cuenta con opciones de dos cuartos para alojarse con hijos grandes o amigos. Por más que en los alrededores haya alguna que otra playa y senderos, más vale entrar al complejo para no salir y dejarse mimar. El helipuerto privado es solo una muestra de la alta gama de la propuesta.

En Ponta dos Ganchos todos los búngalos tienen vista al mar.

Gentileza Ponta dos Ganchos

En Ponta dos Ganchos hay búngalos de diversos tamaños, todos muy bien equipados.

Sofía López Mañán

Las islas de la zona le dan nombre a las categorías de los bungalós: Anhatomirim, Arvoredo y Esmeralda, por ejemplo. Algunos llegan a ocupar terrenos de 310 m2, con gimnasio, pileta, jacuzzi y sauna privados. Todas tienen vista al mar; algunas regalan amanecer y otras, atardecer, en función de la orientación dentro de esta península que se extiende sobre una bahía en dirección al norte, en la zona continental del litoral de Santa Catarina.

En Ponta dos Ganchos los empleados intercomunicados con handies ofrecen soluciones inmediatas, y con solo irse de la habitación bastará para que alguien entre a limpiar y acomodar. En este sentido, la flexibilidad de los horarios contribuye al verdadero relax: se puede almorzar entre las 11 y 17 horas. La sala de masajes está frente al mar y tiene cortinas de género que son atravesadas por el sonido de las olas durante la sesión que siempre empieza por los pies.

La carta del restaurante, diseñada por el chef Lucas Figueiredo, así como los tragos del sommelier argentino Germán Bergongo, están a la altura de la excelencia del lugar. Imperdibles son el ceviche de pez blanco, la degustación de ostras, los camarones tigre flameados en cachaça con puré de mandioca y el lomo de bacalao sobre arroz, con ajo negro y alcaparras.

Ponta dos Ganchos ofrece a sus huéspedes la posibilidad de una comida privada en la que los comensales están solos con la playa para ellos.

Fran Parente

Emplazado sobre un predio irregular de ocho hectáreas, la movilidad dentro del complejo se facilita con carritos de golf que están disponibles a un ring de teléfono. Una playa privada con restaurante, y la islita que está enfrente -comunicada por un coqueto puente- son spot privilegiado para dejarse atender a cuerpo de rey. Las parejas deben reservarla con antelación y suelen usarla para celebrar románticos aniversarios y hacer inolvidables propuestas de matrimonio. Desde u$s 516 la doble con desayuno.

Rua Eupidio Alves do Nascimento, 104 - Governador Celso Ramos. T: +55 (48) 3262-5000. IG: @pontadosganchos

Fuente: La Nación